lunes, 13 de octubre de 2008

´Quemar un billete de 500 para tener luz´

Lunes 13 de octubre de 2008

Medio ambiente. Balears sólo cubre con sus recursos el 36,3 por ciento de sus necesidades
El geógrafo Ivan Murray opina que las islas, apostando por las desaladoras y la incineración, agravan su situación

I.O. PALMA. "Estamos dilapidando con la quema de residuos de Son Reus, en vez de rebuscar entre la basura para generar otros productos. Es como si quemáramos un billete de quinientos euros para disponer de luz", expresa gráficamente Murray para ejemplicar la insostenibilidad del modelo balear.
"Estados Unidos, por ejemplo, utiliza recursos propios para satisfacer el 92,99% de sus necesidades. Este porcentaje se reduce al 60% en la media europea y al 61% en el caso de España. Balears, con sus recursos, tan sólo cubre el 36,3 por ciento de sus necesidades", cuantifica el geógrafo de la UIB.
Balears importa todos los recursos energéticos que consume así como la totalidad de los productos metálicos que usa. Estos denominados "productos metálicos" engloban desde los coches hasta todo tipo de maquinaria. De la misma manera tiene que adquirir fuera del archipiélago más de la mitad de los productos bióticos -los procedentes de la pesca, agricultura, sector maderero- que utiliza. Lo que sí sigue funcionando en Balears es la producción de las canteras, incentivadas además por el boom de la construcción, señala el geógrafo de la UIB.
La solución, para Murray, pasa por diversificar la economía isleña, apostar por un turismo más de proximidad, nacional, y que arribe a las islas en barco, un transporte mucho más ecológicamente sostenible.
Pero Balears se dirige por un camino diametralmente contrario que apuesta por las desaladoras y un tercer horno en Son Reus, denuncia Murray.
"La reconversión del puerto de Palma para poder acoger cruceros de lujo, por ejemplo. Supondrá una inversión de 1.000 millones de euros y aumentará en unas cien hectáreas el actual espejo de agua. Supone un gran consumo de superficie para un turismo que sólo pasa en las islas un día y medio y que, contrariamente a lo que se piensa, no se trata de turistas de alto poder adquisitivo ya que suelen llegar en régimen de todo incluido", ejemplifica el geógrafo.

Un pueblo como Sóller

"La llegada de dos a cuatro cruceros diarios supone aumentar la población de Mallorca en diez o quince mil personas, como un pueblo de Sóller brotado espontáneamente. Los servicios que utilizarán en el puerto así como la eliminación de los residuos que generen se les acabará repercutiendo a los ciudadanos de Palma en aras de la competitividad y debido a que la movilidad de estos barcos les permite desplazarse a destinos más ventajosos", augura Murray.
"En Balears se generan 43,9 toneladas de residuos por persona y año, lo que significa lo mismo como que cada día del año cada balear se colocara una mochila de 120 kilos de peso a la espalda. La media mundial se sitúa en las 19 toneladas anuales y los 52 kilos diarios. En los países empobrecidos o del Tercer Mundo estas cifras se reducen hasta las 7,7 toneladas anuales o 21 kilos diarios", continúa dando cifras Murray.
Todo pasa por darle la espalda al actual modelo de consumo y crecimiento económico y obtener unos beneficios de la conservación medioambiental que, en el caso de Balears, es evidente. Los millones de turistas que cada año llegan a las islas lo hacen atraídos por su riqueza natural.

Fuente