Andratx. el futuro de una especie casi desaparecida de aguas de la isla
L. GUTIÉRREZ / I. M. ANDRATX. El Laboratorio de Investigación Marina y Acuícola (Limia) se encargará del traslado desde Córcega de un centenar de ejemplares reproductores de la especie de centollo mediterráneo Maja squinado con el objetivo de asegurar su supervivencia, ya que está prácticamente desaparecida de aguas de Mallorca. Las instalaciones del Limia se encargarán de la cría en cautividad de la cranca mediterrània y de su posterior suelta en las distintas reservas marinas y en el parque natural de Cabrera.
Este dato lo expuso ayer la consellera de Agricultura y Pesca, Mercè Amer, quien visitó la sede del laboratorio junto al alcalde de Andratx, Francesc Femenías (PSOE).
"La investigación es una herramienta fundamental en el sector pesquero y el Limia hace una gran labor de recuperación de especies y conservación de la biodiversidad", dijo Amer, en declaraciones que recoge un comunicado difundido por el departamento autonómico.
"Este laboratorio tiene grandes posibilidades y puede complementar la tarea que hacemos en las reservas marinas y, de esta manera, ayudar a la reintroducción de especies desaparecidas para así contribuir a mejorar la diversidad", agregó.
En referencia a sus objetivos inmediatos, el Limia tiene previsto mejorar la técnica de cría de este crustáceo. Se trata de un proceso muy delicado y dificultoso, explicaron los técnicos. Un proceso que requiere unas condiciones de temperatura determinadas, sobre todo en la fase en que la cranca mediterrània pasa a fijarse en el fondo marino.
Objetivo reproductor
A largo plazo, la finalidad es lograr la reproducción del suficiente número de ejemplares para devolverlos después al mar. Uno de los lugares que tiene todos los números para acoger todo este proceso es la reserva marina de Levante.
Como muestra de la dificultad de lograr la pervivencia de esta especie está el siguiente dato. De los crustáceos criados en las instalaciones de Limia el año pasado, sólo han logrado sobrevivir ocho, según los datos facilitados por la conselleria de Agricultura y Pesca. Estos supervivientes podrán servir en el futuro como adultos reproductores.
Junto a dicho proyecto de conservación, la Conselleria informó que tiene previsto continuar con su iniciativa de repoblación de la corbina, una especie parecida al escorball (corvallo). Mercè Amer dijo que se trata de un pez con muchas posibilidades comerciales, por lo que, argumentó, "interesa mucho al sector".
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