G. RODAS. PALMA. El pleno del Consell de Mallorca aprobó ayer por unanimidad la declaración de Bien de Interés Cultural, la máxima protección patrimonial, dos barcos de época emblemáticos, Hispania y Alzina.
El Hispania fue un encargo del rey Alfonso XIII a William Fife III, famoso arquitecto naval que no solo diseñó la embarcación sino que también dirigió su construcción en las atarazanas de Pasajes, en Guipúzcoa. Esta balandra, de clase quince metros internacional, que costó más de 100.000 pesetas de la época, impulsó la construcción naval deportiva y la afición a la náutica deportiva en España. En 1993, la Real Fundación Hispania adquirió el barco, que se encontraba en West Mersea, al sur de Inglaterra, donde se había convertido en casa flotante. El objetivo era recuperarlo para la navegación y destinarlo a la formación de jóvenes regatistas. El próximo mes de agosto está previsto presentar la restauración del que está considerado "uno de los pocos ejemplares en la categoría de barcos de regata fórmula quince metros internacional", según consta en la ficha del Consell.
El Alzina, por su parte, es uno de los llaüts tradicionales que conservan los registros originales, con una eslora (8,45 metros) poco habitual entre esta tipología de embarcación. En la actualidad, este barco está en proceso de restauración en la Escola de Mestres d´Aixa del Consell. El destino que le quiere dar la Associació d´Amics del Museu Marítim después de su recuperación será cultural y público, relacionado con la recuperación de las líneas de la navegación a vela.
Archivo de Can Conrado
El pleno del Consell también aprobó la declaración de Bien Catalogado del fondo documental del denominado Archivo de Can Conrado, conservado en el antiguo convento de Nostra Senyora de la Soledat en Santa Maria.
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